Aprovechando una adversidad para convertirla en una oportunidad 16 agosto 2013

Hoy hace justamente un año que sentí una leve molestia en mi tendón de aquiles. Aguanté un par de triatlones que tenía comprometidos y decidí dar por finalizada la temporada al no remitir el dolor agudo que tenía en el calcaneo. Tras tratarme durante dos meses volví poco a poco a la rutina de entrenamientos y a correr progresivamente. Durante tres meses pude entrenar con normalidad y competir con mi nuevo club doc 2001, hasta que un día, de repente volvió el dolor.

Decidí dejar de correr y seguir nadando y centrarme en la bicicleta ya que la Titan Desert sería en dos meses. Durante ese periodo me caí de la bicicleta, con el fatídico resultado de fractura en mi brazo izquierdo, en la cabeza del radio. Peligraba mi participación en la Titan pero un tratamiento exhaustivo y muy exigente en la Clinica Ismec me permitió poder participar en ese gran evento que tantas ganas tenia de hacer. La Titan no le sentó nada bien al pie (andar por las arenas empujando la bicicleta, pedalear tantas horas, etc) y vine peor que fui. Tras un mes intentando poner parches para ver si podía salvar la temporada de triatlón decidimos (mi familia, entrenador, fisioterapeuta y médico) que lo mejor sería parar y someterme a tres meses de tratamiento, ya que la lesión se había hecho crónica. Jamás había parado tanto tiempo, la verdad es que esta siendo una temporada atípica, pero las cosas pasan y no queda otra que aprender de ellas y sacar el máximo partido a cada situación.

Este verano estoy viajando bastante y disfrutando de las vacaciones obligadas, pero si os digo la verdad, lo que me gustaría es estar entrenando y compitiendo como llevo haciendo ocho años.

Esta adversidad la he aprovechado para convertirla en una oportunidad, para tener estabilidad económica que no dependa de mi rendimiento deportivo. Uno de mis trabajos ha sido llevar la escuela deportiva municipal de duatlón ADS. Una iniciativa que en principio no me atrajo mucho, pero conforme pasaba el tiempo me ilusiono formar parte de éste bonito proyecto. Nunca había trabajado con niños, son pura energía, esponjas en todo lo que les trasmites, su ilusión y sus progresos hace que estar a su lado sea una maravilla. Para mi lo más importante es crearles el habito de hacer deporte. También he podido invertir más tiempo en los entrenamientos personales, teniendo un buen grupo, que sacan tiempo de donde no lo hay, entrenan, compiten y llevan para adelante sus familias de una forma asombrosa. Para mi son los verdaderos héroes.

Aunque éste parón se esta haciendo muy largo, hay días que no veo el final del túnel, pero ahí esta la gente que me apoya, mi familia y mi entrenador para hacerme ver que tengo que ser fuerte, paciente y hacer las cosas con calma (cosa rara en mi con el torbellino que soy).

Ya estoy nadando, haciendo algo de gimnasio y bicicleta estática, no tanto como me gustaría, mi exigencia hace que no tenga suficiente con lo que hago. Pero pienso “María NO, haz caso, ya queda menos”.

Este parentesis me esta sirviendo para darme cuenta de lo que de verdad quiero, lo afortunada que soy por poder vivir de mi pasión, el deporte, y tener muy claro que aún me queda mucho carrete por gastar.

Ojala en 2013 pueda hacer algún triatlón, no lo se, no quiero precipitarme después de todo el camino que he recorrido. Pero lo que si se, es que volveré con más ganas que nunca y disfrutaré cada brazada, pedalada y zancada que de.

Quiero dar las gracias a doc 2001 por su apoyo incondicional, a Zambru´s Bikes, Medilast, La Caseta, Spiuk, Progress, Tyr,Victory Endurance, Catlike y Focus por estar a la sombra en todo momento. Y por supuesto a todo el cariño que recibo día a día en redes sociales, que me da energía para seguir luchando contra esta piedra que se ha puesto en mi camino.