Me ha costado mucho poder sacar de mi interior todo aquello que viví el 18 de febrero, cuando no consigues el objetivo marcado es difícil. Os pido disculpas por tardar tanto en sacar este blog. Es imposible describir cuando estas 32 kilómetros sufriendo para llegar a una meta que tanto ansias. A pesar de ello, voy a contaros mi experiencia.
Decidí correr la maratón motivada porque mi madre fue la primera mujer sevillana en la primera edición, allá por 1985. Jamás me había planteado hacer una, pero este verano, en búsqueda de nuevos retos y objetivos se me paso por la cabeza.
No se porque pero mi piernas empezaron a quejarse, a dolerme desde muy pronto, a los 10 km.No es algo que esperas cuando tienes una preparación a pedir de boca, todo según el mister, durante 3 meses. Los test previos realizados fueron satisfactorios. Es verdad que no se llega en las mejores condiciones, cuando el martes antes del día clave, en el último entreno de calidad un clac en el isquiotibial de la pierna izquierda hace que grite y me tenga que parar. Pero no soy una persona de poner excusas y cuando las cosas pasan, hay que hacer una lectura para ver porque ocurren y luchar por conseguir dar lo mejor de ti a pesar de todo.
Volvamos al día x, ese día tan esperado para los que debutan, buscan hacer marca o llevan tropecientas maratones en sus piernas. Sin lugar a dudas los 42.195m es una prueba muy especial y difícil de describir, hay que vivirla y sentirla para poder saber lo que realmente es. Mi objetivo era ambicioso bajar de 3h, corriendo a 4.10 el km, sabia que era difícil pero lo fácil no es lo mío. Los entrenamientos y competiciones previas decían que si todo salía bien podía conseguirlo. Se luchó, se peleópero como os he contado al principio, tener malas sensaciones desde tan pronto en una carrera tan larga hace presagiar que las cosas no van a salir como se quisiera. Fueron muchos kms interminables de pelea conmigo misma y lucha para cruzar el arco de meta. Que cantidad de sensaciones cuando por fin cruzas el arco, ¡por fin puedo dejar de correr! un coctel de sentimientos, felicidad, paz, bajonazo me inundaron.
3.05.23 mi tiempo final en la Maratón de Sevilla 2019.
Agradecida al públicoque me llevó en volandas, ¡qué pasada!, como chillaban y transmitían su energía para seguir hacia delante; por supuesto a mis dos compañeros Jesús y Chambaque me cuidarondurante toda la maratón para que no me faltara de nada, ayyyy ¡¡os debo tanto!!. Y como no a mi pilar fundamental, mi familia que me acompañaron en bicicleta y no me dejaron sola ni un minuto.
No me puedo olvidar de mi fisioterapeuta Ventura Morales, gracias a su profesionalidad los dolores están siempre controlados, a Nuon Sport por planificar el trabajo de fuerza de manera individualizada y a Javier Sola por ser el guía de mi camino. También al Centro Andaluz de Medicina, que cuando a días de la cita saltó la alarma me ayudaron para llegar en perfectas condiciones.
Sin olvidarme de los que me apoyan y ayudan para hacer más fácil mi dedicación al mundo del deporte. Mis patrocinadores: Panes de Salud, Salud en Casa en Farmacias, ZambrusBikes, Spiuk, Doc2001, Fuji Bikes, Farmacia Molina y a los colaboradores: Federación Andaluza de Triatlón, Orca triatlón, Totum Sport, Speedsix, La Caseta , Clinica Acedo & Martin, Nuon Sport, Sockerslovers, Simon Verde Sport Center, Ismec, Crown Nutrition Sport y Running Way.
Mil gracias a todos !!
Fotógrafos Juan José Úbeda y Antonio Ojeda